Una realidad

Ultimamente he estado reencontrandome con la realidad, redescubriendo mi vida, que aun vale y simplemente era desconocida... Mis letras aún siguen plasmadas en pequeños pedazos de papel, en los margenes de una novela, o en el escondite de mi pared... Acá estoy, no me he ido, sigo revolucionando mi mundo, persuadida por la nube de la mentira, aclarándola con la lluvia de la verdad... Mi trabajo era distinto, mis amistades eran distintas, mi familia es diferente, y mis amores son irreverentes... creo que siempre será así, la cordura no sera la mejor amiga de mis temores ni de mis amores... pero ahí esta... Amo esa irreverencia que saca de la rutina las miradas tranquilas de este ser, me encanta despertar cada mañana con una nota sobre mi espejo, mirar a la ventana y ver lo empañado de tu reflejo... Me encanta redescubrirme en el regazo de la ternura, en la paz de la dulzura que sólo tú sabias dejar... Si, sólo podías dejar, dejaste todo vacío, sombrío, con las ilusiones en un frasco, en tubo de ensayo, que se resbaló sobre la profundidad del mar, del mar de realidades y en la isla de un sabio, sabio que solo me pudo aconsejar, que sólo pude escuchar, pero siempre al lado de mi amiga La Sra. Soledad